Con la llegada de las tablas toca el reparto a los hambrientos patinadores que llevan meses esperando nueva madera que destruir.
Imaginad la sorpresa de Dani Rosado cuando recibe el paquete así:
Observa mejor, abre el paquete del todo y flipa con lo que encuentra:
1 comentario:
Madre mia como ha quedado la tabla... que hambre tendría el que le ha pegado el "bocao". :O
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